TERUEL, TORICO, EL CAOS

Ya ha regresado la expedición ministerial de tierras turolenses, donde están teniendo lugar las fiestas del Torico, del ángel, de las vaquillas o de como se le quiera llamar, porque allí cada uno las llama como les sale de las narices. Un éxito absoluto, una vez más, y eso que nuestro ministro Antón Pirulero no pudo asistir finalmente debido a sus compromisos festivo-musicales. Al final, como siempre, ovación de gala de todo el pueblo y alguna que otra lagrimilla. Ya están esperando que volvamos. Y saben que lo haremos.

Iba a poner algunas imágenes de nuestras actuaciones, pero creo que no es bueno querer acaparar todo el protagonismo. Ellos al fin y al cabo también se lo montan bien:

En los descansos de nuestros recitales salían artistas locales que hacían que el espectáculo no decayera nunca. Aquí una pequeña muestra:

Nuestro agradecimiento a la Congregación de las hermanas de la divina providencia, por su guía espiritual, a Gaspar, el perro cervecero, por su extrema generosidad al querer compartir sus gérmenes con nosotros, a la orquesta Dúplex, por continuar con esa inmortal tradición de tocar mil canciones de Ska-p que nunca nos cansamos de escuchar, a la gente que se deja pistolas de agua en el suelo, a la gente que hace regalos a cambio de un Moonwalk y, en definitiva, a todas esas hordas de faranduleros que han conseguido amenizar nuestra estancia.